Hablar con tu bebé puede reportarle beneficios para toda la vida
Todos los padres saben el inmenso gozo que supone ver a su retoño examinar su rostro mientras arrullan y parlotean con ellos. Al crecer, los padres esperan el momento en que pronunciará su primera palabra, y celebran su habilidad para hablar. Además, la mayoría de los padres sienten mucho interés en observar cómo sus niños pequeños aprenden a comunicarse con el mundo.
Sin embargo, ¿sabías que los padres y cuidadores que atienden a bebés y niños pequeños tienen un gran impacto en cómo se desarrolla el cerebro del niño, y que esto tiene una influencia directa en la capacidad del niño para comunicarse de forma efectiva?
Una nueva investigación revela la importancia de fomentar un desarrollo cerebral saludable durante los tres primeros años de vida mediante la comunicación efectiva que tenemos con nuestros bebés y niños pequeños. La calidad y cantidad de interacciones entre adulto y niño durante estos tres primeros años de vida suponen un factor decisivo en la preparación del niño para la etapa escolar, así como para los logros que consiga en esta, ya que influye directamente el desarrollo cerebral.
Los padres pueden utilizar sus palabras e interacciones con sus bebés y niños pequeños para estimular su desarrollo cerebral. ¿Cómo? Comunicándose con ellos de forma continua a lo largo del día, tanto verbal como gestualmente. El objetivo es estimularles a través de las diferentes interacciones con adultos: el hecho de comunicarse con adultos, que usan un vocabulario variado y profundo, ayuda a los niños pequeños a comunicarse mejor y a recibir comentarios positivos que les motivan a comunicarse más.
Muchos padres colocan a sus bebés y niños pequeños frente a pantallas (ej. televisiones, teléfonos móviles, tablets…) durante varias horas cada día para que vean programas infantiles. Este hábito es problemático por dos razones. La primera es que la mayoría de las organizaciones pediátricas recomiendan no situar a los niños de entre 0 y 2 años frente a pantallas, ya que necesitan otro tipo de estímulos para su desarrollo físico y mental. La segunda es que la mayoría de estos programas no contienen estándares educacionales adecuados a las necesidades que requieren esas edades tempranas. Los programas están pensados para apelar a bebés y a niños, pero carecen de supervisión por parte de expertos que aseguren las imágenes visuales apropiadas, un lenguaje o temáticas adaptadas a ellos. Añadido a estos problemas, se suma que muchos de los programas para niños disponibles en Internet, en plataformas como YouTube o Vimeo, son creados con fines publicitarios que no hacen sino reducir la calidad de dicha programación.
Algunas recomendaciones de cómo debes hablar a tu bebé para estimular su desarrollo mental y cerebral
Aquí van algunas formas mediante las que puedes comenzar a comunicarte con tus bebés o niños pequeños para promover su desarrollo mental y prepararles para la etapa escolar:
- Eliminar la exposición a pantallas (ej. televisiones, teléfonos móviles, tablets…) en niños de entre 0 y 2 años. Limítalo a 1 hora o menos si tienen entre 3 y 5 años.
- Asegúrate de que los programas que están viendo son apropiados para su edad y desarrollo.
- Lleva a tu bebé o niño pequeño contigo a lo largo del día
- Habla con él en el coche mientras conduces, y explícale a dónde vais o a quién vais a ver.
- Habla con tu bebé mientras tiendes la colada o preparas la comida, explicándole lo que estás haciendo.
- Siéntale a la mesa durante la hora de la comida en familia para que socialice. Asegúrate de incluirle en la conversación.
- Colócale en la sillita del carro de la compra y cuéntale lo que estás comprando y por qué.
- Siéntate y juega con él durante periodos cortos de tiempo a lo largo del día.
- Permítele sentarse o jugar cerca de ti y pregúntale de vez en cuando qué es lo que está haciendo (ej: “¿Has cogido tu mono de peluche?” “¿Estás ocupado jugando con tus bloques?” “¿Qué estás construyendo?”)
Comprensiblemente, puede resultar complicado hablar de forma frecuente con bebés y niños pequeños que todavía no pueden contestar. Sin embargo, cuando los padres se toman tiempo para interactuar con ellos, en sus cerebros tienen lugar muchos procesos internos que estimulan su mente y les ayudarán a estar preparados para el colegio. Las primeras veces podrán ser algo incómodas o difíciles de empezar, pero con un poco de práctica la mayoría de los padres adquieren su propio ritmo para mantener conversaciones unilaterales, a la vez que reaccionan a las respuestas verbales y no verbales de sus bebés.
Charlar con bebés y niños pequeños mientras se tiende la colada, se cocina, se va a la compra, se hacen recados, o se come es importante para su socialización y desarrollo cerebral. Ellos son como esponjas, y están constantemente almacenando las imágenes, sonidos e interacciones de su alrededor. Cuanto más rico sea el entorno, más se desarrollan sus cerebros y se vuelven sensibles a captar nueva información. Qué suerte que algo tan poderoso y beneficioso, sea gratis.
Fuente: Thirty Million Words Initiative (2018). The University of Chicago Medicine, Chicago, IL.
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About the instructor
Proactive Parenting
Deanna Marie Mason PhD
More than 20 years of clinical experience helping families:
Bachelor's Degree in Registered Nursing, Master’s Degree in Pediatric Nurse Practitioner and PhD in Nursing. University professor, patient education specialist, pediatric researcher, published author and reviewer to first-line international scientific journals, continuous philanthropic activity related to health promotion and education, wife and mother of two children.
